Notas suaves y afrutadas. Acidez cítrica media, citronela, cuerpo ligero y sedoso.
19,50 €
La historia comienza en 1980, cuando los padres de Iván adquirieron una parcela de tierra que llamaron Buenavista, inspirados por la impactante belleza de las montañas que los rodeaban. Inicialmente dedicada al cultivo de maíz, fríjol y a la ganadería, la finca se transformó poco a poco en una plantación de café, su verdadera pasión.
La familia, compuesta por ocho hijos, participó activamente en el desarrollo de la finca. Con los años, los cafetales se convirtieron en símbolo de unidad y de transmisión. Cada árbol cultivado representa un vínculo vivo entre generaciones.
Hoy en día, cada uno de los hermanos y hermanas gestiona una parte de la finca. Iván, uno de ellos, se ha dedicado en cuerpo y alma a la producción de cafés de especialidad. Curioso y comprometido, ha perfeccionado su saber hacer junto a expertos, sin dejar de lado los métodos tradicionales y el respeto por el medio ambiente.
El café de la finca Buenavista se cultiva de forma orgánica, a mano, en armonía con los ritmos de la naturaleza. Cada grano se recoge en su punto óptimo de madurez para revelar toda la riqueza del terroir y la pasión de una familia profundamente enraizada en su tierra.
Este café es mucho más que un producto: es el fruto de una historia familiar, de un compromiso diario y de una tierra generosa. Una invitación a saborear Colombia a través de un café cultivado con amor y paciencia